Apuntes para un estudio bíblico de Hechos 12: 1-19
Este relato,
lleno de descripciones detalladas y pintorescos nos muestra por una parte cómo
el
Señor está
pendiente de los apóstoles e interviene según Su infinita sabiduría y
misericordia para salvarlos de sus enemigos cuando así conviene; y por otra
parte vemos una curiosa contradicción: la comunidad ora por una intención pero
cuando Dios la concede ¡no lo creen! (¿se nos parecen?...).
12,1
el rey
Herodes.-
Del nombre de
Herodes no se guarda buen recuerdo en la historia de Jesús y de su Iglesia.
Conocemos a Herodes el Grande, que pretendió quitar la vida al niño de
Belén...Conocemos a Herodes Antipas, por el que fue sacrificado Juan el
Bautista, y que desempeñó un papel peculiar en el proceso contra Jesús. Ahora
tenemos ante nosotros otro Herodes, nieto del primero. Éste se llama Herodes
Agripa I. En los años 41 al 44 tuvo como rey bajo su dominio todo el territorio
de su abuelo.
Nuevamente nos
relata Lucas que existe persecución en contra de los cristianos.
12, 2
12, 3
Lucas nos da a
entender que lo que motiva a Herodes no es otra cosa que darle gusto a un
grupo de
judíos que veía con malos ojos a los cristianos. Tenemos aquí un ejemplo de un
típico dirigente político que no actúa movidos por el deseo de hacer justicia
sino para servir a sus propios intereses, para quedar bien con determinado
grupo poderoso.
ERAN LOS DÍAS
DE LOS ÁZIMOS.
Es decir, el
tiempo de la Pascua judía. (ver Ex 12). Ello significa que Jerusalén bulle de
gente.
Recordemos que
por esos días de la Pascua la ciudad se llenaba de peregrinos que venían a
comprar su cordero sacrificado en el templo para comerlo en familia y celebrar
la Pascua.
12, 4
Dado que Pedro
es el líder de la comunidad cristiana, seguramente Herodes temía que los
discípulos se presentaran a rescatarlo. Por ello hace que lo custodien
dieciséis soldados.
después de la
Pascua.- Jesús muere después de la Pascua. Herodes quiere esperar a que pase la
Pascua para mandar matar a Pedro. Seguramente quiere esperar que la ciudad se
despeje y haya menos testigos de su crimen así como menos seguidores dispuestos
a crear un levantamiento para liberar a su dirigente.
12, 5
la
iglesia.-Lucas utiliza aquí el término 'iglesia' para designar a la comunidad
cristiana como asamblea convocada por Dios.
oraba
insistentemente por él a Dios.- La comunidad está muy preocupada por la suerte
de su dirigente y hace lo más efectivo y poderoso que puede hacer: no
levantarse en armas, no ir en bola a tratar de rescatarlo, sino orar al
Todopoderoso, al Señor de los imposibles, al que todo lo puede.
El libro de
los Hechos de los Apóstoles nos muestra aquí que para la comunidad cristiana la
oración es lo primero a lo que recurren. Saben que el problema es inmenso, que
los rebasa, que ellos solos no pueden resolverlo, así que acuden al
Todopoderoso, a Aquel que es mayor que cualquier problema que podamos
enfrentar.
insistentemente.-
Es interesante que Lucas enfatiza que la oración era 'insistente'. Jesús nos
invitó a orar con insistencia (ver Lc 11, 5-13) porque sabía que los seres
humanos tendemos a ser inconsistentes, a dejar a la mitad lo que empezamos, a
desanimarnos cuando no vemos resultados inmediatos (y no siempre se ven
resultados inmediatos cuando oramos). La primera comunidad cristiana aprendió
bien esa lección.
Seguramente le
llegan noticias cada vez más desesperantes: que aprehendieron a Pedro; que lo
encadenaron;
que lo custodian ¡dieciséis soldados!, que de ahí no lo libra nadie...Sin
embargo, la comunidad no se entrega a la desesperación. Sigue orando, sigue orando,
sigue orando...
12, 6
Lucas enfatiza
la tremenda vigilancia a la que estaba sometido Pedro. Atado por dos
cadenas, cada
una atada a su vez a un soldado que percibía el más mínimo movimiento de Pedro
(como querer levantarse, moverse, intentar liberarse, etc). Y por si esto fuera
poco, la puerta misma de la cárcel está custodiada.
aquella misma
noche.- Al estilo juanino nos cuenta Lucas que es de noche. Aquí en esta cárcel
impera la tiniebla, rigen aquellos que son enemigos del Evangelio y pretenden
encadenarlo, condenarlo, enmudecerlo. Sin embargo su aparente reinado no durará
mucho tiempo. Aquel que vence a las tinieblas está pronto a intervenir.
estaba Pedro
durmiendo.- Seguramente Pedro estuvo orando también, y de su oración obtuvo tal
paz, tal confianza en que Dios permite todo para bien, que ahora duerme como un
bebé.
12, 7
el Ángel del
Señor.- En este primer momento 'Angel' está con mayúscula, como para significar
que este mensajero divino está actuando de parte de Dios.
se llenó de
luz.- Otra vez este texto recuerda lo que dice San Juan: "La luz brilla en
las tinieblas y las tinieblas no la vencieron" (Jn 1, 5).Ahí donde parecía
regir la noche y el poder del mal, Aquel que es la Luz rompe la oscuridad.
REFLEXIONA:
El Señor es el
Único capaz de derrotar toda negrura, toda situación desesperada, toda
angustia.
Sólo Él es
capaz de hacerse presente cuando nos sentimos atrapados en una prisión de dolor
o de miedo y liberarnos. Ya antes nos ha contado San Lucas cómo el ángel del
Señor liberó a los discípulos encarcelados (ver Hch 5, 19ss).
LE DIO EL
ÁNGEL A PEDRO EN EL COSTADO, LE DESPERTÓ Y LE DIJO: 'LEVÁNTATE APRISA. Como el
ángel que despierta al profeta Elías y lo anima a comer (ver 1Re 19, 5-7), el
ángel toca a Pedro y lo despierta para pedirle que se levante pronto.
Es de suponer
que Pedro obedece de inmediato. Él, que es tan dado a responder y a repelar,
seguramente no
le responde al Ángel: '¿y cómo quieres que me levante si estoy encadenado?'
sino que hace lo que se le pide. Cuántas veces el Señor se hace presente en
nuestra vida para liberarnos de alguna situación que nos oprime y nos hacemos
remolones, no queremos obedecer de inmediato, no acabamos de creerle que con Su
poder podemos de veras superar aquello que nos tiene atados.
Y CAYERON LAS
CADENAS DE SUS MANOS.
Dios libera a
Pedro de las ataduras injustas a las que lo habían querido someter Herodes y
los
suyos.
12, 8
La indicación
que le da el ángel a Pedro nos recuerda la de la Pascua (ver Ex 12, 11). Esta
es
una nueva
liberación. Estar descalzo es señal de esclavitud pero el Ángel le pide a Pedro
que se calce. Una vez más el Señor con Su brazo poderoso libera a su pueblo de
quienes pretenden esclavizarlo, someterlo, acabar con él.
12, 9
Lucas hace
notar la natural reacción de Pedro, que se figura estar soñando o viendo
visiones.
Quizá Dios permite que Pedro no acabe de darse cuenta de lo que pasa para que
no interfiera su lógica y lo haga resistirse pensando que lo que sucede es
imposible (recordemos cómo comenzó a hundirse cuando quiso caminar sobre el
agua. Ver Mt 14, 30). En lo que decide si está viendo visiones o no, Pedro,
dócilmente, se deja llevar.
12, 10
Para Dios no
hay imposibles. Lo que no hubiera podido suceder sucedió: Pedro pasó tan
tranquilo frente a todos los guardias y ninguno se percató de su presencia. No
se nos dice si les entró un repentino sopor o si en ese momento se pusieron a
platicar y se distrajeron. El caso es que nadie se da cuenta de que se les
escapa el preso... Y la puerta de hierro que impedía su salida se le abre
solita.
SALIERON Y
ANDUVIERON HASTA EL FINAL DE UNA CALLE. Y DE PRONTO EL ÁNGEL LE DEJÓ.
Como siempre
sucede, una vez que el Ángel ha cumplido su misión, se va.Cuando ya está a buen
resguardo de los que podrían hacerle algo malo, Pedro se queda solo. De pronto
el fantástico recorrido termina y esa sensación de estar viviendo una visión se
acaba. Siente el aire frío de la noche (por algo le dijo el ángel que llevara
el manto y la túnica) y se da cabal cuenta de que está libre, en una calle de
la ciudad. Hasta aquí llegó la ayuda para realizar lo que él solo no hubiera
podido realizar. De aquí en
adelante le
toca decidir qué hacer, resolver su situación.
12, 11
Quizá Pedro
había llegado a creer que su fin estaba cerca (con tanto soldado cuidándolo
parecía imposible la escapatoria). Ahora comprueba una vez más que Dios tiene
Su plan y Sus caminos no siempre son lo que parecen.
12, 12
Pedro se da
cuenta de que es un prófugo de la justicia y que no debe andar vagando por las
calles pues alguien puede reconocerlo y denunciarlo (no sea que todavía ande
por ahí aquella criada del Sumo Sacerdote...), así que se va a casa de la mamá
de Marcos. Los estudiosos del libro de los Hechos coinciden en considerar que
este Marcos al que se refiere Lucas es el primo de Bernabé, discípulo de Pedro
y autor de uno de los Evangelios.
(Ver Col 4,
10; 1 Pe 5, 13;)
DONDE SE
HALLABAN MUCHOS REUNIDOS EN ORACIÓN.
Aquí acostumbran
reunirse los apóstoles y los miembros de la primera comunidad cristiana a orar.
Lucas empezó su relato de la formación de la Iglesia con la escena de la
comunidad orante (ver Hch 1, 12ss); siempre habla de que los fieles se reunían
para orar (ver Hch 2, 42; 4, 24ss) y que la oración acompañaba las palabras y
las acciones de la Iglesia (ver Hch 3,1; 6,6; 7,59; 10,9). Ahora Lucas muestra
el poder de la comunidad orante de un modo que impresiona.
12, 13-14
Este episodio
está tan lleno de detalles curiosos que no deja lugar a dudas de su
historicidad.
Lucas nos
pinta magistralmente la escena: Pedro afuera de la puerta, volteando para todos
lados, cuidando de no ser visto, llama a la puerta. La sirvienta pregunta:
'¿quiééééén?' y cuando quizá oye: '¡soy yo, Pedro, ábreme!' se sobresalta,
quizá se lleva las manos a la cabeza y, loca de contento, en lugar de abrirle
la puerta a Pedro ¡se echa a correr para avisarles a todos que Pedro está ahí!
12, 15
Imaginemos la
escena: la mujer entra gritando que ahí está Pedro y todos han de haber
pensado: 'pues si ahí de veras estuviera Pedro, ¿cómo es que no le abrió?' y no
le creen.
PERO ELLA
CONTINUABA AFIRMANDO QUE ERA VERDAD.
Las buenas
noticias en estos relatos (tanto en el Evangelio como en los Hechos) las dan
las mujeres pero nunca les creen. Lo bueno es que ellas insisten, mantienen lo
que podría llamarse 'santa necedad': no quitan el dedo del renglón hasta que
logran hacer oír su voz...
ENTONCES ELLOS
DIJERON: 'SERÁ SU ÁNGEL'.
Le dan una
explicación para salir del paso: será su ángel de la guardia el que tocaba la
puerta. Le dicen nada más para que deje de molestar. Dice la Biblia de
Jerusalén que esta frase es "eco de una creencia popular en los ángeles
custodios, considerados como una especie de 'doble' espiritual de su protegido.
12, 16
Es cómico que
mientras la comunidad alega si es verdad o no que ahí está Pedro, éste sigue
tocando a la puerta, seguramente sorprendido de que Rode no le haya abierto
todavía...
AL ABRIRLE, LE
VIERON, Y QUEDARON ATÓNITOS.
En algún
momento debe haber cesado el alboroto que armaba la muchacha insistiendo en que
afuera estaba
Pedro y los demás que la contradecían y la consideraban loca. Y en ese
momentito sucedió que se oyó el 'toquido' en la puerta y todos se han de haber
quedado helados, mirándose unos a otros en tanto Rode ponía cara de 'se los
dije'. Y ¡allá van en tropel a abrir la puerta!
12, 17
Pedro los hace
callar. Es notable la minuciosidad en el detalle de lo que describe Lucas (les
hizo señas con
la mano para que se callasen).
les contó cómo
el Señor le había sacado.- Pedro da el crédito a quien merece. No inventa una
historia en la que él quede como héroe, una especie de 'Zorro' que se escapa de
la cárcel gracias a su astucia. Tiene claro que debe su libertad, su vida, todo
lo que es y tiene, al Señor que, como dice el salmista, ha hecho con él prodigios
de misericordia.
Y AÑADIÓ:
'COMUNICAD ESTO A SANTIAGO Y A LOS HERMANOS. Evidentemente no se refiere a
Santiago el hermano de Juan que había sido asesinado por Herodes. Santiago es
el jefe del grupo 'hebreo' de los cristianos de Jerusalén. Es el llamado 'pariente del Señor' (ver Gal
1, 19). Es el mismo que los intérpretes católicos consideran autor de la
epístola canónica de Santiago. No se puede decir con seguridad si es o no el
apóstol Santiago.
SALIÓ Y MARCHÓ
A OTRO LUGAR.
Pedro sabe que
Herodes lo mandará buscar y se pone a salvo.
12, 18
Podemos
imaginar su desconcierto cuando se despertaron y descubrieron que todo estaba
tal
como lo
dejaron la noche anterior (las cadenas cerradas, las puertas cerradas, los
guardias en sus puestos) pero el preso ¡se había esfumado!
12, 19
Era común que
los guardias pagaran la condena que le estaba destinada a los presos que
custodiaban y
que se les escapaban.Este pasaje abre y cierra con la descripción de la
crueldad de Herodes. Preparación para lo que nos informará Lucas a continuación
acerca de este despótico tirano.